Específicamente conoceremos la visión de Marisol Figueroa, gerente general de Alimentos y Bebidas de Chile – AB Chile e ingeniera de alimentos, quien nos contará sobre el quehacer del profesional en aspectos generales. En este caso, ella pertenece a la asociación gremial AB Chile que reúne a productores e importadores de alimentos y bebidas analcohólicas, tanto nacionales como extranjeras.
Y también leeremos la opinión de Moisés Leiva, Gerente de Alimentos de la Asociación de Empresas de Alimentos de Chile, Chilealimentos A.G. entidad privada de carácter gremial, que reúne y representa a empresas de alimentos elaborados y compañías de maquinaria, equipos y de servicios relacionadas con el procesamiento de los alimentos. Promueve el desarrollo y protección de las actividades que le son comunes a sus asociados y la defensa de sus intereses, en Chile o en el extranjero, ante las autoridades y entidades públicas o privadas.
Marisol Figueroa. Ingeniera de Alimentos PUCV.
Gerente en Alimentos y Bebidas de Chile A.G.
Es necesario aclarar que uno de los principales aportes del ingeniero de alimentos. es un profesional con conocimiento técnico que actúa como puente entre distintas empresas desde áreas legales, desarrollo de políticas publicas y conocimiento alimentario, para hacer llegar entre todos los actores relevantes de las empresas, estos mensajes a la autoridad con fundamentos técnicos y científicos.
En ese sentido, Moisés Leiva, considera que el ingeniero de alimentos es el profesional formado técnicamente para aportar conocimiento práctico en varias áreas del sector alimentario, tanto del mundo público, privado o emprendimientos propios. En lo público puede tener diversos roles en apoyo de los distintos Ministerios en funciones técnicas, regulatorias, fiscalizaciones etc.
En una empresa elaboradora, puede desempeñarse en departamentos de calidad, producción, investigación y desarrollo entre otras. Puede aportar conocimiento para desarrollar asesoría a clientes compradores y como emprendedor, puede generar su propia empresa que atienda múltiples necesidades que tienen los consumidores de hoy, puede ser de servicios o de elaboración de productos alimentarios”, enfatizó Leiva.
Moises Leiva Riffo. Ingeniero en Alimentos Universidad de La Serena.
Gerente Alimentos en Chilealimentos A.G
Ejemplo de trabajo del ingeniero de alimentos
Figueroa planteó un ejemplo para entender de mejor forma el quehacer del ingeniero dentro de un contexto específico. Existía una solicitud desde hace años sobre dar certeza jurídica, respecto de 2 ingredientes nuevos, la “alulosa y la tagatosa” que reemplazan al azúcar, la idea era poder mejorar el perfil nutricional en un alimento, más aún pensando en los índices de obesidad a nivel global, por lo tanto, tener estas alternativas de ingredientes, con certeza jurídica de cómo es el uso, la rotulación y la seguridad de que además son ingredientes reconocidos por la autoridad, es de gran importancia. También dentro de la Comisión de Aditivos, se constató que eran ingredientes y por tanto debían presentarse tal cual, ante la Comisión de Reglamento Sanitario de los Alimentos, que a su vez actúa como cuerpo legal. Entonces a los ingenieros de alimentos les toca hacer este tipo de propuestas, con sustentos técnicos y científicos de formulación y desarrollo de alimentos, para que los ingredientes puedan ser utilizados por el marco regulatorio adecuado y tener certeza jurídica de que son ingredientes inocuos.
Con respecto a la legislación, un ingeniero de alimentos puede estar presente en temas como “rotulación, parámetros microbiológicos, aditivos, nuevos productos, microtoxinas, etc. El profesional debe manejar la parte regulatoria y de aditivos que son ejes del día a día de su trabajo en una empresa de alimentos, todos debiesen saber que existe un reglamento, cuales son sus capítulos y quizás ahí las universidades debiesen profundizar un poco más. Ahora bien, para mi la idea es que los ingenieros de alimentos estén presentes en todas las áreas de fiscalización, desarrollo, calidad, producción, etc.
La verdad es que es nuestra carrera la que debe estar dando apoyo en el sector gubernamental como en el Minsal, Sag, Sernapesca, Achipia, etc”, reflexionó Marisol Figueroa.
Desde el punto de vista de Leiva, el aporte del ingeniero desde su lugar laboral, es representar al sector ante el gobierno de Chile en el área de Asuntos Regulatorios. Esta representación se concreta por ejemplo en el Comité Nacional del Codex Alimentarius y La Comisión del Reglamento Sanitario de los Alimentos entre otras.
“Además estoy tras la representación de la Industria Alimentaria a nivel internacional, frente a otros gobiernos y organismos internacionales, manifestando nuestro apoyo en la ejecución de una cadena productiva sustentable, inclusiva y resiliente. También, como Ingeniero en Alimentos, represento a la Industria Alimentaria, manifestando nuestros desafíos como por ejemplo, alimentar a una población que crece cada día y que hoy enfrenta situaciones críticas producto de la pandemia, como es el aumento de personas que no tienen acceso a alimentos y la lamentable pérdida y desperdicios de una tercera parte de lo que se produce, lo que nos demuestra claramente, que los sistemas alimentarios requieren mejoras y acciones multisectoriales conjuntas”, dijo Moisés Leiva.
Quien a su vez tiene como responsabilidad potenciar el gremio, atender los temas transversales de la industria alimentaria, relacionando el quehacer del sector con la Agenda 2030 de Naciones Unidas, aportando con soluciones a los desafíos planteados en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible y por ello participan del Food Systems Summit 2021, que se lleva a cabo en estos momentos y donde se espera que los estados miembros, incluido Chile, entreguen soluciones integrales para mejorar los actuales sistemas alimentarios afectados, tanto por el cambio climático como por la pandemia.
Lo cierto es que Chile ha tratado durante años de ubicarse como potencia alimentaria, diferenciarse como un país productor y para eso es necesario trabajar de la mano con profesionales sólidos y técnicos que colaboren en hacer posible ese país tan buscado y ellos son sin dudas los ingenieros en alimentos.
Evolución de la industria alimentaria
El desarrollo de la industria de alimentos, ha tenido una importantísima evolución con respecto a lo que los consumidores y la población en general pide o quiere, pero, por otro lado, en base a lo que realmente necesita y eso se logra al generar un balance entre conciencia medioambiental, junto al trabajo empresarial para disminuir las huellas de carbono, de agua, manejo de residuos, etc. “Entonces el ingeniero de alimentos observa qué es lo que la gente pide, qué es lo que necesitan, todo ello bajo el marco jurídico por el que se rige y ahí podemos comprender que este rol es trascendental, pues a veces se tienden a caricaturizar los procesos alimenticios por falta de conocimientos profundos en el tema, pero no hay que olvidar que nosotros los ingenieros en alimentos también somos parte del mismo ecosistema y nos alimentamos de la misma forma que cualquier otra persona”, aclaró la ingeniera.
El estigma de los “alimentos procesados”
Este es un polémico concepto que se ha visto duramente manoseado por diversos sectores, en opiniones inexpertas, generando grandes confusiones y errores conceptuales.
Cuando hablamos de mayor durabilidad de un producto, citamos el concepto de alimento
procesado y en diversos sectores le ponen la connotación de “malo” o “causante de obesidad”. De hecho, hay un Proyecto de Ley que se está conversando, para que los establecimientos educacionales eviten los alimentos procesados y todo lo que tenga aditivos en general. “El tema es que, si no usamos ciertos aditivos, no podemos proporcionar una vida útil mayor de esos productos y la verdad es que nosotros los ingenieros en alimentos, estamos capacitados para producir un alimento balanceado, seguro, sano y que dure”, acotó la profesional.
Al final el tema alimentario, es de responsabilidad de la sociedad completa, los esfuerzos debiesen estar puestos siempre desde la mirada de la difusión y la educación, sobretodo en lo que respecta a las cantidades o porciones correctas a consumir. Hoy se debe conversar con urgencia sobre la obesidad para que los distintos grupos tomen conciencia de la forma en cómo se alimentan y cómo arman sus dietas y las de sus hijos y elaborar todos los sectores juntos, propuestas desde la educación, incentivando la actividad física y deportiva, mayor capacitación sobre cuidados alimenticios e incluso a quienes cocinan en lugares públicos.